sábado, 7 de marzo de 2015

RECUERDOS



Ahí estás, como cada día, montada en tu bicicleta en dirección desconocida, y como siempre sin echarme un solo vistazo. ¿A dónde irás? ¿Al trabajo, a la universidad, a casa de algún conocido?
Admiro tu melena al viento, tu hermosura, esa esencia de mujer que dejas a tu paso; has crecido mucho desde aquel último, terrible día, en que te vi marchar. Ha pasado tanto, tanto tiempo, que tú ya ni te acuerdas de que un día me conociste. Al fin y al cabo, yo ya no soy nada en tu vida.

Solo soy la vieja casa donde naciste.