domingo, 28 de febrero de 2016

FIN DE SEMANA ROMÁNTICO



Solo a ella se le podría ocurrir guardarse el pan de todo el viaje y convertirlo en migajas....
Yo pensando en un viaje romántico, con la puesta de sol, el catamarán surcando el tranquilo mar Mediterráneo......
Y ella me aparece con los aperos de pescar de su abuelo. Una guía de pesca de la biblioteca y un traje de buzo.
Regresamos del romántico fin de semana rodeados de gaviotas. Revolotean alegres alrededor de ella. Le comen de las manos. A mí me miran con odio, yo también.
Sus risas son contagiosas. Me inspiran bellos poemas. Tampoco ha sido tan nefasto este fin de semana. ¡Me he vuelto a enamorar perdidamente de ella!